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Yo sé que muchas bodegas tienen una página web, simplemente porque les han dicho que es conveniente tenerla, y porque sus competidores la tienen, y como la tienen aunque solo sea porque la vea su consejo de administración es necesario tenerla.
Pero ocurre que según la tenemos nos quedamos poco satisfechos con lo que tenemos, todo el mundo opina que si debería de hacer esto y de hacer lo otro.
Ocurre también que para presentar nuestros productos en la venta a nuestros clientes no utilizamos casi nunca la página web. Estamos, tanto nosotros como nuestros clientes tan imbuidos de la forma clásica de presentar nuestros vinos, que parece un sacrilegio hablar en las presentaciones de nuestra página web. Y como mucho hacemos una referencia a la misma de forma verbal o en nuestras tarjetas y medios impresos.
Y seguimos empeñados en estar presentes en todos los eventos de degustación en los que pueda estar, porque, yo no sé si vendo más, pero lo que sé es que si no estoy vendo menos. Hacía referencia en otro post a la frase bastante acertada de que “Si queremos vender más no podemos pescar todos en la misma charca”. En ese caso hablaba de los blogs pero se puede hacer extensivo a nuestra página web.
Nuestra actividad comercial y de Marketing nos permite estar muy poco en contacto muy poco con nuestro consumidor final. Y ese consumidor final, hace unos años (una pequeña élite), si era muy entendido o quería serlo, compraba alguna de las guías de vinos súper reconocidas, y esos entendidos junto con los premios que recibían los vinos y el propio canal de distribución transmitían al resto del mercado qué productos eran de mayor calidad y cuáles podían venderse a distintos precios. Ahora, hay mucha más gente que escribe de vinos, y muchísima más gente que lee sobre vinos lo que estos últimos escriben. Por lo que la imagen de marca de los vinos se ha democratizado. Y controlamos mucho menos lo que dicen de nosotros.
Total, que se ha hecho mucho más importante nuestra presencia en Internet. Y la mejor opinión que podemos sacar sobre qué uso se está haciendo sobre nuestra página es utilizar una herramienta de analítica web que nos permita conocer quién nos ha visitado, qué perfil tiene, qué le interesa, por donde ha entrado, por donde ha salido, etc.
Hablaba en otro artículo el debate sobre la necesidad o no de una herramienta de analítica web de pago o gratuita. Sobre eso hay mucho que opinar. Pero hay una verdad incuestionable y es que más importante que tener una buena herramienta de analítica web es que saber aprovechar la que uno tiene.
El proceso de entender lo que te puede aportar la analítica web es un proceso de incremento de sensibilidad para con el tema según se va profundizando en la materia.
Y hay otra verdad absoluta, y es que cuanto sabes algo sobre el tema te das cuenta de la importancia de la información que recibes. Te das cuenta también de que necesitas saber más. Y que esto te lleva en la mayor parte de los casos a pagar por que te ayuden a utilizar la herramienta que tienes ya sea esta gratuita o de pago. Y cuanto más pagas generalmente más contento estás de lo que pagas porque más consciente eres del valor añadido que te aporta la información que recibes.
Creo que mucho mejor que yo lo explica Gemma Muñoz en su post “Modelo de Madurez en Analítica Web” en el blog ETC. Muchas gracias Gemma.