Exportar vino bajo presión.

Conozco un tipo (quizá yo mismo) que cuando sale de viaje le gusta callejear. Todo normal. Otra cosa es que cuando veo un supermercado no puedo evitar meterme y coger un carrito ante la sorpresa de mis acompañantes. Luego salgo con el carro vacío, claro. Puede parecer raro, pero me intriga saber qué se llevan para comer esas gentes en esa ciudad, da igual cuál sea, y qué diferencias hay con nuestros “super”. Una de las cosas que me atrae, como no, es el vino. Antes de salir uno puede pensar que la Europa no productora de vino, debería estar inundada de vino español, ¿por qué? Por bueno y por abundante, entre otras cosas. Y sí, también busco vinos de mi tierra (que es toda España, debo ser raro, pero me siento tan a gusto en todas partes…), en las cartas de los restaurantes, aunque luego pida otra cosa para probar algo nuevo.

Exportar vino bajo presión

Lo cierto es que me ha sorprendido. Me explico. En unos cuantos países (a saber: Inglaterra, Dinamarca, Lituania, Holanda, Finlandia o Suecia), me llama la atención encontrar poco vino español (para lo que cabía esperar), y una abundante representación de Argentina, Chile, Sudáfrica e incluso Australia y Nueva Zelanda. ¿Se les ocurre algún sitio más lejano? (en la Antartida no hacen vino, todavía). ¿Por qué se han puesto las pilas para llegar hasta aquí? Porque su mercado interior era muy limitado (supongo) y los países de su entorno tal vez no prometían mucho (supongo también, esta vez mirando un mapa). Es decir: O exportaban o se lo bebían ellos. No tenían más remedio. Y es así, la presión hace que la gente haga cosas (muchas buenas). Y sin presión, la verdad, ¿para qué exportar si lo vendo dentro?

En lo referente a qué zonas dominaban el resultado también me sorprendió. Encontré algún Rioja, por supuesto, pero en comparación con España había vinos que dentro no estaban tan extendidos, concretamente bastantes vinos de Valencia y Murcia en sus diferentes denominaciones de origen. ¿Por qué? Un representante de vinos de Bodegas Casa de la Ermita , fantástica bodega de Jumilla, me decía hace dos años en una presentación de productos de Murcia en un hotel madrileño: “Aquí en Madrid tiene sentido estar e insistir, pero vete tú a vender vinos de Murcia más al norte de Valladolid…”. Vamos, que para la mitad del mercado español Jumilla tenía una imagen escasa y todo era Rioja, o Ribera, o… pero nunca Jumilla. Sin embargo buenas bodegas de Rioja, Ribera o Priorato vendían tan bien dentro que ¡para qué salir!

Me pregunto: con las oportunidades que surgen en lo referente a tecnologías, redes sociales, etc. ¿Lo aprovecharán las bodegas en general, o sólo las que tengan más presión y será eso, la presión, lo que les haga ponerse a trabajar en ello?

Se admiten apuestas. Usted, hombre por favor, responda (pero sin presión, sólo por el placer de hacerlo).

Fuente de foto: coci-nom-nom.tumblr.com